Hace tres meses celebrábamos que había nacido un niño sin un padre vivo reconocido, y ya estamos celebrando su muerte. Celebrando! Aquí se celebra todo, que hay hasta una cultura gastronómica para ello. Me pierdo un poco, pero parece ser que los viernes no se puede comer carne, ni blasfemar, ni tener relaciones sexuales (ellos le llaman hacer uso del matrimonio, siempre me ha parecido muy graciosa la expresión), ni bailar, ni cantar… Lee el resto de esta entrada
Abr6