De mi nueva cafetera

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Me encantan las mañanas lluviosas de primavera, hoy he mirado por la ventana con nostalgia, llorando por mi reciente pérdida amorosa, pensando que podía haber hecho algo más, que lo podía haber evitado cuidándole mejor. Luego me sequé las lágrimas y me dije a mí misma que los electrodomésticos también se cansan de la rutina, y si es una cafetera mucho más, que no es culpa mía, aunque no la haya mimado con un buen antical. Pues ala, hoy me toca ir a desayunar a un bar, como un camionero. Dejarán que me lleve mis madalenas?
Después de mi ración de cafeína ya le veo la parte positiva y me digo: Pues me compro la cafetera del George Clooney y cada día me haré uno diferente. Y me voy a la tienda y veo tantas y tan diferentes, que me agobio y acabo con una de goteo de toda la vida, que hace diez cafés a la vez y es mucho más práctica, dónde va a parar. Optimizar el tiempo, se llama, lo preparas por la noche, lo haces por la mañana, y te vas bebiendo ese brebaje a lo largo del día taza a taza.
Por el bulto de la caja pensaba que no me cabría en la cocina, que tendría que hacer obras en mi casa, pero no, la saqué y le pude hacer un huequito en la encimera, que queda bien y todo, le da un toque de color diferente y ya podré dejar de comprar mangos, papayas y kiwis, que lo hacía para darle alegría al rincón del frutero, alguien se ha dado cuenta de lo que decoran esas frutas tan coloridas? Pero ahora ya tengo mi cafetera granate y volveré a las manzanas Golden y a los plátanos.
Quise probarla, aunque fueran las ocho de la tarde y a esa hora el café me desvele, cómo voy a esperar a mañana? Si no la probaba no dormiría de la emoción, como en la noche de Reyes. Y no dormí, del chute de cafeína, claro y aquí estoy, escribiendo a las tres de la madrugada mientras se calienta la plancha, que hay que aprovechar el tiempo y el subidón y tengo una pila de siete quilos de ropa, que aún me tendré que hacer otro café para terminar, y ya que estoy voy a darle una manita de pintura al pasillo, que buena falta le hace.

Acerca de MariCarmen

Una superviviente en un mundo de hombres (qué ilusión, siempre quise decir esto) Madre, hija, hermana, esposa... de hombres. Cuando llega una nueva mujer a mi vida me siento un poco más liberada de la presión. Si hasta los gatos de papá son chicos! A ver qué sale de aquí. Todos los datos son estrictamente reales salvo algunos, siempre hablaré en primera persona salvo alguna vez y nunca mentiré, exageraré o fantasearé salvo en contadas ocasiones. Algún secreto puede salir maquillado como literatura y alguna experiencia que me apunte como personal puede no serlo. No lo desvelaré jamás, a no ser que me emborraches y me jures amor eterno. Los nombres de las terceras personas no son siempre reales. Las terceras personas no son siempre reales.

Un comentario »

  1. Me gustan las Chicas trabajadoras a altas horas de la madrugada. Pero dime ¿esto no es un síndrome verdad? Quiero decir que si es algo pasajero o te pasa a menudo, no mujer, por saberlo digo. Así si te tengo que invitar a tomar algo, depende de la hora y el día obtaré por la cafeína o mejor la manzanilla. Según las necesidades que tengas, de planchar puntualizo.

    Un beso de los de sábado, sosteniendo una tacita de porcelana blanca con un arpeggio dentro.

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  2. Mira lo por el lado positivo….la cafetera te ha aportado esta noche lo mismo que un hombre…….ilusión por saber cual, emoción al colocarla en casa y ver que queda bien y una noche de desvelos calientes obviemos el hecho de que el calor lo aporta la plancha….jajajjaja
    Un abrazo

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  3. El café es todo un mundo. Le regalé a mis padres la cafetera del Clooney, pensando que les encantaría tener café a cualquier hora y en un segundo y me la tuve que comer con patatas. Preferían su cafetera italiana de toda la vida, la que se pone en el fuego y sale el café haciendo ese ruidito de olla exprés. Yo pensaba que el café era café, pero parece que no. Los hay que sólo toman café americano, otros prefieren el café de bar y a mi personalmente, cualquiera me parece bueno.
    En fin, espero que tu cafetera te acompañe unos cuantos años.

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